8 Formas de Causar Buena Impresión en el Trabajo

Desde nuestra sección “Aportes”, compartimos el artículo que amablemente nos ha enviado José Martín de Trabajos.Net, denominado “8 Formas de Causar Buena Impresión en el Trabajo”, en que se revisan una serie de tips que pueden mejorar la impresión que se de en entornos laborales. Los invitamos leerlo y comentar, a continuación lo reproducimos con autorización del autor:

Nunca subestimes lo importante que es causar una buena impresión a tu jefe. Hacer eso lo hará notar… y sólo por las razones correctas.

Cuando tu jefe se dé cuenta de que puede confiar en ti para hacer un gran trabajo, él o ella comenzará a darte mayor responsabilidad. Esto, a su vez, puede conducir a ascensos y aumentos de sueldo.

No querrás mermar tu reputación y terminar que recurrir a la bolsa de trabajo por culpa de una mala vestimenta o un comentario inapropiado.

Aquí tienes 8 consejos para comenzar a impresionar a tu superior:

1- Vestir apropiadamente

Sigue siempre el código de vestimenta de tu organización. La mayoría de las empresas ya no requieren que los empleados usen trajes para trabajar, pero es esencial tener una apariencia limpia y ordenada.

Si te permiten usar vaqueros y camisetas, asegúrate de que estén en buenas condiciones. Tus zapatos también deberían estarlo. No te pongas ropa de playa para trabajar, a menos que, por supuesto, trabajes en la playa. Por lo general, no puedes equivocarte si sigues el ejemplo de tu jefe al elegir tu vestuario laboral.

En este vídeo puedes ver algunas ideas para mejorar tu estilo en la oficina.

2- Respeta a tus compañeros de trabajo

Cuando los compañeros se respetan unos a otros, por lo general se llevan mejor. Y pocas cosas son más importantes para un jefe que eso. Nadie quiere que sus empleados peleen.

Siempre evita actuar de manera descortés hacia cualquiera de tus compañeros. Llega a tiempo a la oficina, especialmente si estás relevando a alguien de su turno. Nunca te atribuyas el mérito del trabajo de otra persona. Comparte siempre la carga de trabajo. Discúlpate si alguna vez te las arreglas para ofender a tu colega.

3- Pedir permiso para ausentarse del trabajo cuando estés realmente enfermo

¿Piensas que el hecho de ir a trabajar cuando estás enfermo en lugar de quedarte en casa impresionará a tu jefe? Estás equivocado. Los jefes razonables saben que un empleado enfermo no sólo no es productivo, sino que puede contagiar a los demás. ¿De qué le servirá a nadie si todo el personal tiene que tomar un día por enfermedad?

Si tienes fiebre o crees que tu enfermedad puede ser contagiosa, tómate el día libre. Puedes duplicar tu carga de tareas cuando vuelvas a trabajar, o si te sientes bien, hazlo desde casa si tu jefe te lo permite.

4- Usar una etiqueta adecuada en el lugar de trabajo

Usar la etiqueta adecuada en la oficina te ayudará a causar una buena impresión a tu jefe. Puede sonar sencillo hasta que te des cuenta de que muchas personas olvidan sus modales (ojalá no lo hagas demasiado a menudo).

Por ejemplo, si te permiten usar un móvil en la oficina, asegúrate de que no sea una distracción para ti ni para nadie más. Hablando de teléfonos, también deberías saber cómo usar el teléfono de tu oficina. Seguro que has estado usando uno durante años, pero las reglas para recibir y hacer llamadas en el trabajo son diferentes que cuando tus amigos están al otro lado de la línea.

También hay una gran diferencia entre el e-mail personal y el profesional. Conoce las nociones básicas a la hora de usar el correo electrónico corporativo te ahorrará muchos malentendidos. Al salir a cenar con tu jefe, compañeros de trabajo o clientes, debes comportarte lo mejor posible.

5- Entrar en una crisis

Cuando ocurre una crisis inesperada en el trabajo, por ejemplo, la empresa de catering se va de la ciudad antes de una gran conferencia que tu empresa está organizando o cuando el ordenador de tu jefe se bloquea, ¿quién le causará una mejor impresión al mismo: quien entra en pánico o quien entra en acción para solucionar el problema? Aprende a hacer frente a las crisis de manera rápida y eficaz.

Una forma de hacerlo es imaginar diferentes escenarios y elaborar planes para reaccionar ante cada uno de ellos. Entonces, si alguna vez sucede algo inesperado, estarás completamente preparado para enfrentarlo.

6- Representa bien a tu empresa en conferencias y reuniones

Cuando asistes a una conferencia o a una gran reunión de negocios en nombre de tu empleador, es tu deber causar una buena impresión. Se reflejará bien en tu organización y tu jefe apreciará tus esfuerzos.

Vístete apropiadamente, establece contactos con otros asistentes. Asegúrate de traer información para compartir con tu jefe y compañeros de trabajo si no pudieron asistir a la reunión. Aquí puedes encontrar otros consejos para aprovechar las conferencias.

7- Enfrentar tus errores

Si aún no lo has hecho, en algún momento cometerás un error en el trabajo. Incluso puede ser uno grande. Le pasa a todo el mundo. La forma en que manejes el error influirá en la opinión de tu jefe sobre ti mucho más que el error en sí.

Lo primero que debes hacer es admitir lo que pasó. No ignores tu error ni trates de culpar a nadie más. En lugar de eso, asume toda la responsabilidad y luego encuentra una manera de arreglarlo. A pesar de que tu jefe pueda estar molesto porque cometiste un error en primer lugar, al menos reconocerá que hiciste todo lo correcto al contestarle.

8- Evita discutir temas que incomoden a los demás

A los jefes les gusta tener ambientes tranquilos. ¿Quién puede culparlos? Cuando los empleados trabajan juntos armoniosamente, pueden concentrarse en sus tareas.

Evita iniciar conversaciones sobre temas que incomoden a la gente e incluso podrían llevar a discusiones. Mantente alejado de hablar de política o religión, por ejemplo.

Sobre la autora:

José Martín

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